Axioma blanco remoto: Ella no se ha ido, no realmente. Sólo está en una nueva trayectoria, lejana, una mota blanca en el cielo. Y tú, residuo espacial, viejo resto de un sueño perdido, extraviado de cualquier campo gravitacional, sigues girando. Tus sensores sólo captan su luz. Te dices que es noble, es real, que serás mejor, que una comprensión elemental de los principios de la mecánica rotacional predicen indudablemnete que las órbitas se reunirán en un punto crítico. Pero principalmente eres sólo una ruina. Frío futuro de neón: "¿Qué dirección es abajo?"